La iniciativa sancionada por unanimidad tiene la finalidad de que el Municipio cuente con horas de natatorios disponibles para la tercera edad en situación de vulnerabilidad social, para  garantizar el acceso con fines recreativos, terapéuticos y de mejoramiento de la calidad de vida. Se realizará a través de beneficios impositivos y compensaciones de deudas con clubes, sindicatos, hoteles, hosterías, cabañas o cualquier otra entidad, empresa o institución con natatorio climatizado.

“Las vecinas de los centros de jubilados Rosa Mosqueta, Cumbres Nevadas, Amanecer y Pirén, son las verdaderas protagonistas de este proyecto que surgió para que se pueda garantizar el acceso a actividades acuáticas a otros adultos mayores de la ciudad”, expresó Marks, en relación a la formalización como política pública de las actividades que, a través de la Subsecretaría de Deportes, vienen realizando los centros de abuelos.

La concejal añadió que “se apuesta a la articulación entre el Estado y el sector privado con el objetivo fundamental del mejoramiento de la calidad de vida de las personas mayores, entendiendo al envejecimiento activo como un pilar fundamental y al estado municipal como responsable de garantizar ese derecho”. Referentes de centros de abuelos de la ciudad acompañaron el tratamiento y celebraron la sanción.