DESCRIPCIÓN SINTÉTICA: SE DECLARA DE INTERÉS MUNICIPAL Y CULTURAL El CLUB DEL TRUEQUE BIBLIOTECA BARRIO LERA

ANTECEDENTES

 

Constitución Nacional.

 

Constitución Provincial.


 

Carta Orgánica Municipal.

 

Ordenanza 2071-CM-10. Jerarquización de las declaraciones de interés del Concejo Municipal. Reglamentación.

 

 

FUNDAMENTOS

El origen de la red de trueque se remonta al año 1995, en Bernal, partido de Quilmes del conurbano bonaerense, cuando un grupo de vecinos ecologistas, deciden reunir a vecinos del lugar para hacer frente a necesidades concretas surgidas de la falta de trabajo; el club reunió en sus comienzos a veinte personas, para alcanzar un sentido de vida superior mediante el trabajo, la comprensión y el intercambio justo y responder a normas éticas y ecológicas antes que a los dictados del mercado, el consumismo y la búsqueda de beneficio a corto plazo (Gatti, 2010).

 

Para celebrar sus reuniones eligieron las instalaciones abandonadas de la ex fábrica textil La Bernalesa. De acuerdo con el relato de los fundadores, la iniciativa estaba inspirada en la experiencia brasileña de la «Campaña contra el Hambre», liderada por Betinho, que había reunido de modo descentralizado a un conjunto de instituciones sociales y varias ONG.

 

La red de trueque surgió como resultado del encuentro de dos vertientes: una ecologista, el Programa de Autosuficiencia Regional, creada por De Sanzo y Ravera; y otra empresaria, la Red Profesional, de Horacio Covas. Esta asociación ayudó a potenciar ambas iniciativas, trasformándolas en una nueva propuesta, superadora y de mayor alcance. Con el correr de las experiencias y la practica, se fueron realizando aportes metodológicos, introduciendo técnicas de dinámica grupal, incorporando los intercambios de saberes como una nueva modalidad, y poniendo énfasis en la capacitación permanente como condición para el crecimiento de la red .

 

En Argentina, el desempleo comenzaba a ser un flagelo en la sociedad en esos años, por lo que el trueque aparecía como una alternativa frente a una necesidad social. De esa manera, diversos clubes comenzaron a reunirse los sábados, concurriendo a trocar productos que producían, y paulatinamente estos grupos fueron creciendo, llegando a tener hasta unos sesenta participantes.

 

Durante sus primeros seis meses de vida, el club de trueque de Bernal evolucionó en medio de una atmósfera de entusiasmo local. Por turno, los socios ingresaban a un sector donde dejaban diversos productos como tartas, empanadas, pizzas, artículos de vestimenta y artesanía, descontándose el consumo personal del saldo de la tarjeta.

 

La experiencia comienza a repetirse en diferentes lugares de la ciudad de Buenos Aires y luego en diversos lugares del país, llegando a contar con una red o nodo de mas de diez mil socios.

 

En el año 1996, se desató una verdadera eclosión del trueque que alcanzó una dimensión nacional, expandiéndose especialmente en las provincias de Río Negro, Santa Fe, Córdoba y Mendoza. En 1997 son 2.300 socios y en 1999 llegan a 180.000 los participantes. Un año más tarde, el incremento es exponencial: el trueque alcanza a 320.000 personas, reunidas en cerca de 400 nodos ubicados en 15 provincias y la ciudad de Buenos Aires (Abrahamovic, 2003).

 

En 2001, con la crisis económica y social que se produce en la Argentina, la cantidad de nodos se duplica y los participantes llegan a medio millón en más de veinte provincias. A comienzos de 2002 se produjo la eclosión, registrándose un impresionante ascenso a partir del impacto producido por la crisis del sistema bancario argentino, que aunó la recesión económica a la disminución notable del dinero circulante, calculándose ya la existencia de cuatro mil quinientos nodos en funcionamiento y de un número de participantes superior a los dos millones.

 

En Bariloche, en febrero del año 2000, la Cooperativa de electricidad Bariloche a través del Area de Acción Social, fomentó la creacion del primer espacio de trueque. Los eventos se realizaban en el gimnasio Las Quintas, llegando a contar con una cantidad de 200 socios que participaban del trueque. Los únicos requisitos para ser miembro de la Red Global de Trueque eran asistir a las reuniones, capacitarse y ser productor y consumidor de bienes, servicios y saberes. No buscaban promover artículos o servicios, sino “ayudarse mutuamente a alcanzar una vida superior mediante el trabajo, la comprensión y el intercambio justo, pensando que la realización como seres humanos no necesita estar condicionada por el dinero”.

 

En menos de un año, se generaron en la región, distintos puntos de encuentro para trocar: Bolsón, Pilcaniyeu, El Hoyo se sumaron a esta iniciativa. Desde el Ministerio de Economía se firmaron acuerdos de colaboración entre la Red de Trueque y distintas instituciones, con el fin de abastecer de infraestructura, en algunos casos de materia prima para las producciones, como así también la difusión de las actividades y encuentros”.

 

Con el correr de los años y la estabilización de la economía a nivel nacional, estos clubes se fueron reduciendo, hasta que prácticamente desaparecieron. Sin embargo, ante la crisis económica que se esta viviendo en el país, entendemos que es una estrategia más que valida para muchas familias de nuestra ciudad que no pueden acceder a un trabajo y se encuentran en una difícil situación para poder realizar las compras de alimentos y cuestiones necesarias para la subsistencia. En el trueque, muchas personas encuentran alternativas para poder generar ingresos o solventar los gastos cotidianos en sus hogares.

 

Es por ello, que la comisión de la Biblioteca del Barrio Lera, se ha organizado y comenzaron nuevamente con el Club del Trueque. Las actividades se organizan en el Gimnasio de la escuela 201 Juan Ramón Jiménez y es organizado por la comisión, junto con vecinas y vecinos interesados en generar y reproducir este sistema solidario, que permite dar y recibir ayuda para hacer más leve la situación actual. En dichos encuentros, no solo se truecan alimentos, vestimenta y utiles escolares, sino que también se prepara un desayuno y espacio de encuentro para la comunidad.

 

Por lo expuesto anteriormente, es que consideramos necesario declarar de interés Municipal y Cultural el Club del Trueque de la Biblioteca Barrio Lera, a fin de promover dichos encuentros.

 

AUTOR: Presidente del Concejo Municipal Gerardo Del Río.

 

INICIATIVA: Concejal Juan Pablo Ferrari (JSRN).

 

COLABORADORAS: Maribel Manriquez, Paula Barberis.

En virtud de las atribuciones otorgadas por el art.09.º) inciso “y” del texto ordenando (RESOLUCIÓN N.º 462-CM-15) del reglamento interno del Concejo Municipal.


 


 


 


 


 


 

EL PRESIDENTE DEL CONCEJO MUNICIPAL DE

SAN CARLOS DE BARILOCHE

RESUELVE

 

Art. 1°)

Se declara de interés municipal y cultural al Club del trueque Biblioteca Barrio Lera.

 

Art. 2°)

La presente declaración no implica la obligatoriedad de efectuar erogaciones por parte de la Administración Municipal.

 

Art. 3°)

La presente resolución se aprueba ad referéndum en la próxima sesión ordinaria del Concejo Municipal.

 

Art. 4°)

Comuníquese. Dese a publicidad. Cumplido, archívese.

 

San Carlos de Bariloche, 04 de abril de 2024.

GRDR/GBN/sag

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CMSCB.DDYA.MO.01 – Rev.00

fecha: 04/ 04 /2024