DECLARACIÓN Nº 3007-CM-24

 

DESCRIPCIÓN SINTÉTICA: SE DECLARA DE INTERÉS MUNICIPAL, COMUNITARIO Y SOCIAL LA INVESTIGACIÓN NAPOLEÓN ARGENTINO ARANEDA

 

ANTECEDENTES

 

Constitución Nacional.

 

Ley 3946: Establece el día 22 de octubre Día Nacional del Derecho a la Identidad.

 

Ley 25633: Institúyase el 24 de marzo como Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.

 

Ley 26743: Ley de Identidad de Género.

 

Constitución de la Provincia de Río Negro.

 

Ley 4765: Prohibición de exhibición de imágenes, homenajes y recordatorios a funcionarios de las Dictaduras Militares.

 

Ley 4956: Crea una Comisión Legislativa Especial Investigadora por la Memoria, Verdad y Justicia.

 

Carta Orgánica Municipal.

 

Ordenanza 2033-CM-10: Consolidación Normativa. Establece Calendario de Conmemoraciones, Efemérides y Celebraciones Municipales.

 

Ordenanza 2905-CM-17: Se Crea el Consejo Local Consultivo y Participativo de la Diversidad Sexual.

 

https://sindicalizandonos.blogspot.com/2015/03/companerasos-trabajadorases-colegas-39.html

 

https://www.centrocultural.coop/blogs/utopia/2017/07/07/bibliotecarios-desaparecidos-39-anos-de-la-ultima-dictadura

 

https://enestosdias.com.ar/cronica/el-pianista-que-jamas-llego-al-concierto

 

FUNDAMENTOS

 

El 12 de diciembre de 1975, Napoleón Argentino Araneda fue secuestrado en la ciudad de Mendoza. Era concertista de piano y empleado bancario, días después de su desaparición tenía un concierto en el Teatro Independencia de Mendoza al cuál nunca llegó.

 

Nacido el 8 de junio de 1948 en nuestra ciudad, Napoleón vivió su primera infancia en el barrio Las Quintas. Al separarse sus padres, fue apartado de su madre y hermana y entregado a una familia mendocina que lo crió desde los 6 años de edad. No fue una adopción formal, no hay papeles. Lorenza, su madre adoptiva, tenía dos hijas de su primer matrimonio, que se convirtieron en sus media hermanas.

 

Desempeñó su cargo como bibliotecario en el Banco Mendoza en mayo de 1973, pero todos sus compañeros y familiares sabían de su pasión por la música y lo acompañaban a sus recitales.

 

En 1974 volvió a su ciudad natal para tocar en el Camping Musical Llao Llao donde se reencontró con parte de su familia materna.

 

Vilma, la mayor de las tres sobrinas de Napoleón, recuerda que tenía un concierto en el Teatro Independencia de Mendoza al que nunca llegó. El padre de Vilma había olvidado documentación en la pensión donde vivía Napoleón, pero cuando volvió ya no estaba. Al momento de su desaparición, aquel 12 de diciembre de 1975, tenía 27 años.

 

El 24 de diciembre, Justina Del Carmen Ladino respondió formalmente las intimaciones recibidas de ausentismo de su hermano adoptivo en el Banco: “Cumplo en informarle que desde el día 12 del actual, ha desaparecido de mi domicilio. Desde esas fechas hemos agotado todas las gestiones de todo tipo con entidades oficiales, amigos, etc, a fin de localizarlo; desgraciadamente sin ningún éxito hasta el momento”.

 

Con el regreso de la democracia, el 31 de julio de 1984, la hermana adoptiva de Napoleón se presentó ante la Comisión Nacional Sobre la Desaparición de Personas para denunciar su secuestro.

 

Hasta el momento sólo obraba una denuncia de desaparición en la CONADEP, que lo mencionaba como oriundo de Bariloche. No había fotografía nítida para difundir su búsqueda, ni datos de la familia biológica y adoptiva.

 

El único vínculo era con el padre, que se rehusó a colaborar con la búsqueda y se perdió cualquier contacto. A casi medio siglo de su desaparición, no existían muestras de ADN que permitan al Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) comprobar si alguno de los restos hallados en fosas comunes de Mendoza le pertenece. No hay registros de su paso por un centro clandestino de detención y su caso no se incluyó en los juicios por la verdad.

 

Más de 600 cuerpos del período 1974-1983 permanecen, por mandato judicial, a resguardo del EAAF, a la espera de ser identificados. El meticuloso e innovador trabajo que realiza, merecedor de reconocimiento internacional, permitió ponerle nombre y apellido a 825 desaparecidos y desaparecidas de esos años cruentos.

 

La única certeza que se tenía del pasado de Napoleón era que había nacido en Bariloche y estuvo a punto de desmoronarse: el Registro Civil negó durante 3 meses que existiera un acta de nacimiento, los archivos de maternidad del Hospital Zonal fueron destruidos por el agua, no consta en los libros de bautismo de la iglesia Inmaculada, la más antigua de la ciudad, y fue entregado a otra familia antes de la edad escolar.

 

Toda la documentación reunida se sumó a su expediente en el EAAF, donde después de casi medio siglo de desaparecido, familiares dejaron muestras de ADN para tratar de restituir su identidad robada.

 

Napoleón no era un militante político o sindical. Tampoco integró nunca las comisiones gremiales internas del Banco Mendoza. “No estaba en ninguna comisión, ni le interesaban los temas sindicales ni políticos. Sólo le interesaba la música, lo condenaron por ser artista y homosexual”. Esa fue la conclusión de Vilma, su sobrina.

 

Familiares y amigos no sabían nada de él. Algunos decían que se había ido a Chile y otros, que había sido víctima del comando Pio XII.

 

A fines de julio de 1975, en el Diario de Mendoza, el Comando Moralizados Pío XII se presentó oficialmente ante la sociedad como “un grupo moral y defensor de la salud pública y que sale a la lucha, ya que se observa que la acción de la policía y los jueces está totalmente limitada por una acción débil e inocua”. Ellos anticiparon que serían “inmisericordiosos” con la “presencia indecorosa”. Proponían que a los homosexuales se los interne en “campos de reeducación y trabajo” y compensen a la Nación “la pérdida de un hombre útil”, o que simplemente hay que “encerrarlos o matarlos”.

 

En Río Negro, Napoleón figura dentro del registro oficial de la Secretaría de Derechos Humanos, entre los 15 desaparecidos que aún tiene la Zona Andina, pero su historia es prácticamente desconocida en su ciudad natal, donde sólo vivió seis años. Su caso tampoco figura en los antecedentes de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y recién este año se incluyó su nombre en los pañuelos blancos que cada 24 de marzo se pintan en el tradicional Centro Cívico.

 

La Legislatura de la provincia de Mendoza resolvió, en marzo de 2016, colocar una plaqueta en el ingreso de su Biblioteca, conmemorando los 40 años del golpe, en homenaje a los bibliotecarios Napoleón Argentino Araneda y Pedro Ulderico Ponce Sgattoni “desaparecidos en la última dictadura militar”.

 

Si las y los homosexuales fueron específicamente un objetivo para el sistema represivo estatal y paraestatal durante el terrorismo de Estado, es una discusión que parece haber comenzado a darse por la lucha y reivindicación del colectivo LGTBIQ, y por investigaciones sobre documentos de inteligencia. Su reivindicación como desaparecido de la comunidad LGTBIQ concedería un principio de justicia, al menos a su memoria.

 

Juan Carlos Jalil es la persona que llevó a cabo esta investigación. Es comunicador social barilochense, desde los 22 años ejerció el periodismo en medios gráficos, radiales y agencias de noticias de la ciudad patagónica, especializándose luego en la comunicación institucional. Dirigió la comunicación del Concejo Municipal y del Municipio de Bariloche, donde se desempeña actualmente.

 

Durante tres años investigó por cuenta propia la historia de Napoleón, articulando los nexos para poder conversar con gente que lo conoció y pueda dar testimonios sobre él. Tan persistente fue su búsqueda e investigación que parte de la familia biológica de Napoleón, brindó muestras de sangre para que puedan ser analizadas por el EAAF y así incorporarlas para cotejar datos genéticos.

 

Es la intención de este Cuerpo resaltar la labor de Juan Carlos Jalil ya que reconstruir la memoria de un barilochense es reconstruir también nuestra memoria colectiva, y en línea con todas las ordenanzas de adhesión a manifestaciones en favor de los derechos humanos, de género y por la verdad y la justicia, creemos importante seguir profundizando en contar la historia para que Napoleón sea reconocido por nuestra comunidad como un vecino que no pudo volver nunca a su ciudad natal por el odio del terrorismo de Estado.

 

AUTORA: Concejala Julieta Wallace (Incluyendo Bariloche).

 

 

El proyecto original N.º 122/24 fue aprobado en la sesión del día 4 de julio de 2024, según consta en el Acta N.º 1191/24. Por ello, en ejercicio de las atribuciones que le otorga el Art. 38 de la Carta Orgánica Municipal,

 

EL CONCEJO MUNICIPAL DE SAN CARLOS DE BARILOCHE

SANCIONA CON CARÁCTER DE

 

DECLARACIÓN

 

Art. 1°)

Se declara de interés municipal, comunitario y social la investigación periodística de Juan Carlos Jalil El Pianista que jamás llegó al concierto sobre la vida y la desaparición forzada de Napoleón Argentino Araneda, barilochense desaparecido en la ciudad de Mendoza el 12 de diciembre de 1975.

 

Art. 2°)

Se encomienda a la Subsecretaría de Comunicación Institucional del Concejo Municipal que elabore copias de la investigación y de la nota publicada para que sean de libre acceso digital y también se impriman dos copias para la Biblioteca del Concejo Municipal y dos copias para la Biblioteca Sarmiento, a fin de fomentar el libre acceso a la información.

 

Art. 3°)

Comuníquese. Dése a publicidad. Cumplido, archívese.